En la noche de ayer se disputó un partido clave en nuestro máximo escenario, con dos equipos que buscaban objetivos distintos.
Fue un épico partido de Libertad frente a Dublin Central, ganando por 2 a 1 y con inferioridad numérica durante todo el segundo tiempo.
El “Lobo” comenzó ganando, con gol de Rubén Romero sobre los 3′ de la primera parte, luego de un centro en el que pudo anticipar a la defensa rival para desatar la alegría de su gente.
A los 19´, el equipo de Dublin Central lo empató a través de Facundo Trinidad, mediante tiro penal.
Los dirigidos por Gustavo Piegas, tuvieron algunas chances pero no pudieron aumentar el tanteador, en gran medida gracias a la figura del partido, Bruno Roldán.
La finalización de la primera parte fue bastante particular, puesto que se generaron algunos reclamos por parte del elenco de Cien Manzanas, por algunas jugadas puntuales que afectaron a su equipo.
Sebastián Cortes y uno de los colaboradores del DT Lentinelli, fueron expulsados y la situación se volvía muy compleja para la segunda parte del encuentro.
Dublin Central ya no tuvo la posesión de la primera parte y fue cediendo terreno para los hábiles delanteros de Libertad.
A los 36′ del complemento, Maicol Trindade hizo un jugadón y sacó un “zapatazo” que nada pudo hacer Maximiliano Baldasarri.
Amor propio, coraje y rebeldía: fueron los pilares de un equipo que siempre supo que la victoria era un objetivo impostergable.
La victoria del “Lobo” permitió lavantar la Copa como mejor equipo de Liguilla de la Divisional “B” y a su vez forzar una final frente al mismo rival.